Desarrollar significa aumentar, acrecentar, perfeccionar, volver gradualmente más grande ó mejor. Se puede aplicar a cualquier ser ó cosa; por ejemplo, la gente, las actitudes ó productos. Teniendo en cuenta que la vida es un proceso, todos estamos involucrados en desarrollarnos física, mental y espiritualmente. No nacemos desarrollados, pero todos nacemos con el potencial para desarrollarnos. Entonces, ¿Por qué preferir contratar personas inexpertas sobre personas calificadas inconformes? Muy simple, las personas inconformes calificadas creen que lo saben todo, y difícilmente se adaptarán a una organización. Sus habilidades pueden ser buenas pero tienen una actitud prepotente sobre sí mismos ó sobre sus habilidades; se convertirán en un problema. Esto nos dice, que la voluntad de una persona, es más valiosa que sus habilidades. Si tenemos la voluntad de un hombre, él puede desarrollar su potencial.
Existen dos ambientes que influyen en el resultado de nuestra vida:
1. El ambiente en el cual nacemos y somos educados.
2. El ambiente que elegimos nosotros mismos para vivir.
El primer ambiente no es nuestra decisión. Las manos que nos alimentan, la disposición, cómo nos tratan y las cosas que nos enseñan, tendrán mucho que ver con el resultado de nuestra vida. ¿Por qué? Porque somos como la materia prima que puede ser moldeada en casi cualquier forma. Los primeros años de nuestra vida pueden influir en gran parte nuestro futuro, de acuerdo a los paradigmas que se han desarrollado en nosotros. Por supuesto que podemos tomar decisiones por nosotros mismos más adelante, pero aun en ese momento se tomarán, regidas e influenciadas por los paradigmas de nuestro pasado.
El segundo ambiente que escogemos por nosotros mismos, es aún más importante que el primero, porque nos hacemos responsables de nuestras propias decisiones. Entonces si nuestro primer ambiente fue bueno, continuará ayudándonos en nuestro desarrollo; pero si fue negativo, distorsionado ó nos creó dependencia, tenemos la oportunidad de aceptarlo ó crear uno nuevo. Es como nacer de nuevo. El nuevo ambiente nos dará nuevos paradigmas y la oportunidad de desarrollar nuestro potencial. Debemos recordar la influencia y el poder del ambiente. La mente ó el espíritu del hombre son como una semilla, dentro de la cual permanece el potencial de vida. Si la semilla está en un ambiente seco y frío, no producirá, no se desarrollará; se quedará inactiva.
Pero si tomamos la semilla y la colocamos en un ambiente tibio y húmedo, automáticamente crecerá y se desarrollará y alcanzará su máximo potencial si el ambiente es el correcto. En nosotros, es prácticamente lo mismo, si el ambiente es el adecuado, creceremos, maduraremos y produciremos de acuerdo a nuestro potencial. Este principio funciona para nuestra familia, negocio ó cualquier organización.
Siempre debemos considerar tres cosas mientras crecemos y nos desarrollamos:
1. Vivir con una visión de acuerdo a lo que nos gustaría convertirnos.
2. Examinar el pasado para mirar si necesitamos un cambio de paradigmas para alcanzar nuestra visión.
3. Estudiar los valores de la vida para determinar cuáles crearán el ambiente adecuado para conseguir nuestros objetivos.
Nunca debemos considerarnos demasiado viejos para repasar estas cosas. Sin embargo, mientras más tiempo convivamos con un paradigma, es más difícil romperlo. Entonces, debemos aceptar que si queremos desarrollar nuestro potencial, siempre debemos estar preparados para el cambio. Si vamos a desarrollar, a hacer crecer a nuestros hijos, empleados, ó amigos, ó a nuestra sociedad, debemos guiarlos hacia los valores apropiados. Como padres, debemos tomar la responsabilidad de preparar a nuestros hijos para el futuro. Buena parte de su futuro depende de nosotros. Como jefes, debemos desarrollar a la gente, para que se ajuste a nuestras organizaciones con su futuro en mente. El resultado final de la influencia y desarrollo de la gente, es la creación de una cultura dentro del ambiente en el cual vivimos. Siempre debemos recordar que hemos desarrollado y creado nuestras propias situaciones y nuestros éxitos, de la misma manera en que hemos desarrollado nuestra gente.
